El salsifí es un tubérculo de raíz comestible. La carne es blanca, cremosa, de piel gruesa y sabor similar a la alcachofa. Suele comerse hervido, en puré o como parte de un guiso o sopa. Planta de crecimiento lento que requiere de un sitio cálido y soleado para asegurar un buen desarrollo. Lo ideal es sembrar las semillas a 1,30 cm de profundidad con un margen de separación de 10 a 15 cm entre planta y planta y 25-30 cm entre hileras. El suelo deberá ser ligero con un pH de 6 o superior, libre de piedras y con un buen drenaje. Clima 14°C - 29°C. Cosecha: 130 a 150 días después de la siembra o cuando las raíces alcanzan los 30 centímetros de largo o más, se encuentran listas para su extracción.
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